Nuestra historia con las esencias de Nez du Vin
- Redacción TdV
- 21 abr 2019
- 3 Min. de lectura
Actualizado: 25 ago 2019
Conocimos por primera vez las esencias de Nez du Vin, la Nariz del Vino, en una cata organizada por el cuñado de un muy buen amigo, creo diputado por aquél entonces (el cuñado, no el amigo, no nos juntamos con tan malas personas 😉). En ese entonces ya habíamos contraído el virus del vino, y asistíamos a toda cata, evento, venta, que tuviéramos oportunidad. En aquella ocasión la cata la dirigió el sommelier Fernando Ruiz Velasco de Entre + Cepas, ahí lo pueden ver en su página de Facebook. Aquí les dejamos las notas de aquella ocasión, pueden ver que utilizamos la nada despreciable cantidad de 20 esencias, 10 de vinos tintos y 10 de blancos, de las que percibimos bien 8...

Después, tras unos negocios que salieron bien y con el ánimo al máximo porque empezábamos a dar las catas en el que fuera el "Club de Creatividad Aiks Labs", nos hicimos de la caja de las 54 esencias. Nos acompañaron en las sesiones de la etapa de dicho Club, donde empezamos a utilizarlas al inicio de todas las catas, y todas las veces cayeron bien, simpáticas, juguetonas, y siempre abriendo el buen humor.
las esencias de Nez du Vin en nuestras catas en el Club de Creatividad Aiks Labs
No sabemos ustedes, pero nosotros nunca antes habíamos olido el regaliz (36), el brote de grosella negra (37), las lías de vino (33), o el almizcle (46, “una secreción de un rumiante de Asia… Se lo emplea para fijar y exaltar los perfumes”). Y aún seguimos teniendo dificultades para distinguir el espino blanco (24) de la acacia (25), o el albaricoque (durazno, 19) del melocotón (20), pero si encontramos una notita así en un blanco dulzón, como un Chenin Blanc, las podemos sacar y comparar al vino.
Hay otros productos similares por ahí, pero estas son las más populares. A veces se les acusa de un poquito artificiales y sí, puede ser, al final son aromas sintetizados, pero la verdad es que está padre tenerlos todos a la mano y jugar con ellos: ¿cómo huelen juntos la mantequilla (47) y el pan tostado (48)? ¿Esta notita que encontramos en el vino es almendra (49) o avellana tostada (50)? ¿Cuál es la diferencia entre zarzamora (mora, 17) y blue berry (arándano, 16)?
Además, siempre vienen acompañadas con folletos explicativos sobre el olfato y la cata, y de dónde provienen las esencias, con descripciones muy técnicas y científicas (“contiene un conjunto de hidrocarburos terpénicos que aportan una nota cálida y de resina” se lee sobre la pimienta, 43). El librito que acompaña la caja de las 54 también cuenta con tres secciones con "los tres accesos a la cata", es decir cómo encontrar los aromas en los vinos: desde las cepas (uvas), desde las regiones francesas (con unas fotografías hermosas de los tipos de suelo de cada una) o países del mundo, o para cada uno de los aromas en qué vinos es posible encontrarlos. Por supuesto que no son tan precisas y no esperarás encontrar determinadas notas en cierto vino sólo porque la tarjeta o el libro lo dicen, pero son una buena guía. Ahí en la página oficial de Nez du Vin viene un interesante y complicadísimo reto para distinguir vinos y las regiones de dónde provienen basándose sólo en el aroma.
Por si fuera poco, vienen resguardadas en cajas que además de bonitas y elegantes van desarrollando un aroma particular, agradable. De hecho leímos por ahí que esa fue la razón por la que las de la barrica y los defectos se separaran en colecciones aparte, porque por tratarse de aromas más potentes "contaminaban" a los demás.
la colección completa de esencias Nez du Vin
Para hacerte de la colección no hay como adquirir el Gran libro-objeto con las 54 esencias, ya que contiene 28 que no encontrarás en ningún otro lado; aromas específicos complejos como membrillo (11), tilo (26), heno cortado (38), azafrán (44), caramelo (51)... Después podrás completarlas con los juegos de barrica de roble y el de defectos.
Pero si el presupuesto es limitado puedes iniciar con cualquiera de las dos cajas de 12 esencias, ya sea la de los vinos blancos o la de tintos, o adquirir las dos de una vez por un mejor precio en la caja que contiene los 24 aromas. Y claro, siempre puedes regalar, o regalarte, la más pequeña de las colecciones, la cajita de 6 aromas que son la introducción perfecta al mundo olfativo de las esencias de Nez du Vin.
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